La Organización Mundial de la Salud anunció el viernes que la epidemia del nuevo coronavirus se ha convertido en una emergencia de salud pública de interés internacional.

Sin embargo, esto no debe considerarse como un voto de censura en los esfuerzos de China para frenar la propagación del virus, y la Organización Mundial de la salud ha expresado su confianza en ello. Por el contrario, como dijo el Director General de la Organización Mundial de la salud, tedros Adhanom ghebreyesus, expresó la preocupación de la Organización por la propagación del virus a "países con sistemas de salud más débiles".

Hasta el viernes, se habían confirmado casos en 22 países y regiones fuera de China Continental. La mayoría de ellos se refieren a personas que llegaron desde wuhan, la capital de la provincia de hubei, donde se produjo el brote, aunque también hay algunos que han estado en estrecho contacto con personas de la Ciudad.

En este contexto, las advertencias de la Organización Mundial de la salud lanzan pistolas de salida para coordinar los esfuerzos para controlar el virus antes de que haga estragos en los países menos adelantados.

La Declaración del Estado de emergencia sanitaria mundial no solo plantea más requisitos de notificación de enfermedades para los países, sino que también se espera que impulse más fondos y recursos.

Debido a que todavía hay mucho que saber sobre este nuevo virus, porque el origen de la epidemia aún no se ha confirmado y el alcance completo de su propagación aún no está claro, Se espera que las instituciones de investigación y los investigadores en áreas relacionadas puedan aprovechar al máximo la Plataforma de la Organización Mundial de la salud y otros mecanismos de cooperación bilateral y multilateral para coordinar el trabajo, fortalecer la vigilancia y acelerar el desarrollo de vacunas y tratamientos, como ocurrió después de la epidemia de ébola en África occidental en 2014, de acuerdo con el llamado de la Organización Mundial de la salud.

Desde que se identificó el patógeno en un tiempo récord, China ha compartido la secuencia genética del virus con la Organización Mundial de la salud y países y regiones relacionados, sentando las bases para el Desarrollo Internacional de vacunas y tratamientos efectivos.

Al mismo tiempo, los gobiernos de los países y regiones pertinentes pueden aprender de la experiencia en curso de China en la lucha contra la epidemia.

El Ministerio de Relaciones Exteriores de China anunció el viernes que China enviará vuelos chárter para recoger a los Hubei que viajan de vacaciones al extranjero, lo que demuestra la determinación de China de hacer todo lo posible para frenar la propagación del virus en todo el mundo.

A medida que el número de infectados por el virus aumentó de decenas a miles en una semana a casi 10.000 el viernes y 213 murieron, la guerra contra los demonios liberados ha entrado en su momento más difícil.

Pero esto solo unirá aún más al país y consolidará la determinación del pueblo de ganar la guerra.

Se espera que la comunidad internacional reconozca - y lo que es más importante, apoye - los esfuerzos de China para frenar la epidemia y mantener la seguridad sanitaria mundial.